Si las mujeres escasean en la historia de la medicina mundial, en la historia latinoamericana y colombiana son igualmente escasas. Tras alguna mención por parte de los cronistas de alguna chamana primitiva o de alguna curandera colonial, se destaca especialmente, entre las pocas mujeres mencionadas, doña Juana Bartola de Mier y Vargas Gutiérrez de la Rozuela (1718-ca. 1767) quien, en el siglo XVIII, en la barroca y colonial villa de Mompox, perteneciente a la antigua provincia de Cartagena de Indias, siendo Juana miembro de la aristocracia de la isla puerto sobre el río Magdalena, se convierte en la primera protomédica que está reseñada en toda América y, a su vez, en ser la primera mujer en ejercer la medicina en el continente.
Doña Juana Bartola de Mier nació en la calle de la Albarrada de la colonial villa de Santa Cruz de Mompox, fundada por el conquistador Alonso de Heredia en la primera mitad del siglo XVI, villa situada "a 60 leguas de Cartagena a orilla del rio grande de la Magdalena, de temple caliente, cercado de lagunas y a sus espaldas corre el rio Cauca".
A mediados del ilustrado siglo XVIII Mompox tenía 700 casas de habitación y casas tienda de mampostería y cerca de 1.800 casas pajizas, así como 10 iglesias y capillas, incluido el convento Hospital de San Juan de Dios y su iglesia, y era conocida como la capital del contrabando neogranadino. En 1809, fue sede de la primera universidad de la hoy costa caribe colombiana.
El padre de Juana Bartola fue Juan Bautista de Mier y Latorre, quien procedía de la Casa de Mier del principado de Asturias, fue juez, oficial del rey, tesorero de Mompox, miembro de la élite y terrateniente de la región, quien, como se acostumbraba en su tiempo, compró el título de Marques de Santa Coa: "perpetuamente para sí, sus hijos, herederos y sucesores legítimos". Su padre se casó en 1715 con la madre de Juana, doña Ana Gutiérrez y Vargas de la Rosuela.
En el año 1740, Juana Bartola de Mier se casó con su primo, José Fernando de Mier y Guerra, quien era Mariscal de Campo y Caballero de las órdenes de Santiago y de Alcántara y, además, era el dueño de las 77.000 hectáreas que formaban la Hacienda de La Loba.
Doña Juana de Mier no tuvo una formación universitaria, aprendió las artes de curación y, posiblemente, aprendió sobre la medicina de su tiempo al lado de los Hermanos Hospitalarios de San Juan de Dios, que administraban el hospital en la isla desde su llegada en 1636, donde seguramente actuó como voluntaria, además de adquirir conocimientos médicos provenientes de los aborígenes de la región y, también, de los esclavos africanos.
Ejerció su profesión médica, doña Juana de Mier, en el norte el virreinato de la Nueva Granada durante la segunda mitad del siglo XVIII, según los documentos, entre los años 1761 y 1767; destacándose la primera protomédica momposina por el uso de la herbolaria, que también impulsaba el sabio Mutis.
Durante una visita del virrey Sebastián de Eslava a Mompox, en compañía del ilustrado médico y sacerdote gaditano José Celestino Mutis, en 1763, doña Juana Bartola de Mier le consulta a Mutis el caso de los recién nacidos que desarrollaban una enfermedad de corta duración, acompañada de trismus y opistótonos, y al término de la cual morían haciendo "tremendos esfuerzos". Doña Juana de Mier relaciona la enfermedad que se presenta en los recién nacidos con la caída del ombligo y observa que la mayor sobrevivencia se daba en los que conservaban el cordón por más tiempo, estaba describiendo nuestra primera protomédica el tétanos neonatal.
El sociólogo Orlando Fals Borda recreó la escena del marqués Juan Bautista de Mier y Latorre en su lecho de muerte en la casa de los portales en la Albarrada, la calle del puerto de Mompox, incorporando la sabiduría empírica del campesino costeño para enaltecer la figura de Juana Bartola de Mier, la segunda hija del marqués. Según el sociólogo, Juana Bartola de Mier "merece estudio especial, porque tuvo el singular mérito de haber llegado al protomedicato".
Abel Fernando Martínez Martín
Doctor en Medicina y Cirugía, magíster y doctor en Historia.
Grupo de investigación Historia de la Salud en Boyacá- Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia (UPTC).