El médico liberal vallecaucano Jorge Bejarano Martínez (1888-1966), miembro de la Generación del Centenario, para obtener su grado de Doctor en Medicina y Cirugía en la Universidad Nacional, en Bogotá (1913), estudió la cultura física en su tesis La Educación Física, dirigida y prologada por el médico y político liberal José María Lombana Barreneche, que se publicó por entregas en la Revista de Instrucción Pública de Colombia.
En 1914, Bejarano Martínez viajó a Francia, como era costumbre en su tiempo, a especializarse en Pediatría e Higiene. A la vuelta, fue profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional; fundador y secretario de la Sociedad de Pediatría, en 1917; concejal liberal de Bogotá, en varias ocasiones; representante a la Cámara por Cundinamarca; y el primer ministro de Higiene de Colombia en 1946. También dirigió Bejarano Martínez, en varias ocasiones, la Cruz Roja Colombiana y fue vicedirector de la Oficina Sanitaria Panamericana en Washington. Creó en la Universidad Nacional la cátedra de Higiene en 1921 y fue presidente de la Academia Nacional de Medicina y miembro de la Academia de Medicina de Nueva York. Jorge Bejarano Martínez fue el delegado del gobierno colombiano a la IX Conferencia Sanitaria Panamericana celebrada en Washington, a la Primera Conferencia Mundial de Salud de Nueva York y a la XII Conferencia Sanitaria celebrada en Caracas.
Como ministro, en 1948, tras las violencias desatadas en El Bogotazo, que el ministro de Higiene achaca al consumo de chicha, logra la prohibición de su consumo en Colombia mediante una ley que acaba en seis meses con el consumo de Chicha, prohibiendo, desde 1949, el expendio de bebidas alcohólicas no embotelladas con grado alcohólico mayor al 4 %. Prohíbe también el ingreso de menores de edad a las chicherías y su venta en restaurantes. Bejarano ve en el chichismo: "el más grande problema médico higiénico que ha afectado durante siglos a campesinos y obreros de Boyacá, Cundinamarca y Nariño".
Bejarano será también uno de los participantes en el debate sobre la Degeneración de la Raza colombiana, contradiciendo las teorías de Miguel Jiménez López en 1920. Su columna "Comentarios Médicos", apareció en El Tiempo, en 1940.
El médico Jorge Bejarano justifica la importancia de la educación física desde aspectos higiénicos, morales y físicos, citando a Spencer, a Pestalozzi y a Juvenal y su famosa sentencia de mens sana y córpore sano, critica los métodos de enseñanza del país, en los que prevalece el cultivo intelectual y se descuida el aspecto físico. Insiste en la necesidad de formar en la escuela personas disciplinadas, con energías físicas y morales, aptas para el trabajo y resistentes al medio, que no sean, a causa de su debilidad, carga para la sociedad. Afirma que la cultura física no es una prioridad en Colombia, quedándose en decretos, afectando a Bogotá sin llegar a la provincia ni a las escuelas rurales. Resalta el papel social del médico, que, como guardián de la salud del pueblo y asesor del gobierno, debe iniciar una cruzada por la cultura física, contra una vida exclusivamente intelectual y sedentaria, característica de la urbana vida moderna. Habla de los peligros que trae la vida en la ciudad, llena de placeres y cerebros sobreexcitados, que causan debilitamiento y agotamiento, a la vez que son el cementerio de la, siempre añorada, vida en el campo.
Para Jorge Bejarano la educación física está ligada con la salud, la virtud, el trabajo y el progreso, pues la actividad física produce unos "ciudadanos vigorosos que son causa del progreso y bienestar de un pueblo... Nada hay que contribuya a hacer una nación fuerte en la guerra y la paz, como la salud y virtudes de los hombres". Critica los ejercicios militares por ser iguales para todos, defendiendo una cultura física adecuada a la edad y necesidad de cada estudiante, critica también la militarización que han sufrido los recién creados Boy Scouts de Bogotá, la única ciudad donde existían Scouts en Colombia, en la que le había impregnado de un "aura de formación militar", que, en opinión del médico liberal, adulteraba y perjudicaba la institución nacida en Inglaterra. El último capítulo de sus tesis lo dedica Jorge Bejarano a la cultura física de la mujer.
Abel Fernando Martínez Martín
Doctor en Medicina y Cirugía, magíster y doctor en Historia.
Grupo de investigación Historia de la Salud en Boyacá- Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia (UPTC).