El 24 de noviembre de 2020 la Cámara aprobó una solicitud del Gobierno para eximir de responsabilidad a las farmacéuticas fabricantes de vacunas contra Covid-19 por cualquier evento adverso inesperado.
Un total de 13 sociedades científicas y grupos académicos emitieron un comunicado en el que rechazan que se pretenda eximir de responsabilidad a la industria farmacéutica por potenciales efectos adversos que puedan causar en la población las vacunas contra la COVID-19 que vaya a adquirir el país y piden ser tenidas en cuenta en el proceso de selección de éstas.

"Como sociedades científicas manifestamos no estar de acuerdo con eximir de responsabilidades a la industria farmacéutica productora y titular de las vacunas y, consideramos pertinente que, en estos momentos de crisis, se considere clave la co-responsabilidad entre el gobierno y los productores definida a través de los contratos pertinentes, procurando que el riesgo sea el más bajo posible para los colombianos que reciban la vacuna y, por tanto, haya una mínima implicación en daños en la población y, consecuentemente, una mínima implicación económica para las dos partes, entendiendo la necesidad en salud pública de la medida", destacan.
En este sentido ya había emitido un comunicado el Centro de Pensamiento Medicamentos, Información y Poder de la Universidad Nacional de Colombia en el que denunciaba que el 24 de noviembre de 2020 la Cámara de Representantes de Colombia aprobó por voto mayoritario una solicitud realizada por el Gobierno, que exime de responsabilidad a las farmacéuticas fabricantes de vacunas contra Covid-19 por cualquier evento adverso inesperado. En el comunicado el centro expresó su preocupación por este hecho y manifestó que "las decisiones tomadas generan desconfianza y suspicacia sobre cuál es la verdadera prioridad del gobierno nacional", y si se encuentra relacionada "proteger las industrias farmacéuticas y garantizar el libre mercado de las vacunas a cuestas de la falta información existente (en especial sobre la seguridad de las vacunas)".
Desde un aspecto más técnico, indicaron que "los protocolos de investigación que son públicos para las diferentes candidatas a vacunas consideran un seguimiento posterior a la inmunización de dos años". "Tiempo insuficiente considerando que para conocer un perfil de seguridad completo y detectar eventos adversos a largo plazo es necesario por los menos 10 años de monitoreo", complementaron. "Asociada a esta preocupación, se suma que teniendo en cuenta los recientes anuncios realizados por algunas compañías desarrolladoras y dada las nuevas tecnologías utilizadas (ARNm y vectores virales), la incertidumbre sobre sus efectos es mayor", expresaron, y añadieron: "Todavía no es claro si su uso puede ocasionar procesos inflamatorios indeseables, causar comorbilidades o incluso la posibilidad un mayor daño que la misma enfermedad".
Evaluación de los resultados de eficacia y seguridad en Colombia
En este último comunicado las 13 sociedades científicas y grupos académicos hacen un llamado a integrar a la academia y al Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA) en la evaluación de los resultados de eficacia y seguridad de los proyectos de vacuna contra el coronavirus. "Entendemos que, al tratarse de una situación apremiante, el Ministerio de Salud puede tener la potestad de la selección como único actuante en el proceso; sin embargo, sugerimos que se garantice la participación del Invima y de expertos académicos, quienes pueden dar aportes valiosos, basados en la evidencia científica disponible, y, finalmente, un concepto sobre la evaluación de los biológicos", indican.
"Reiteramos la importancia de fortalecer las actividades de farmacovigilancia de las vacunas seleccionadas, al establecer, en coordinación con los laboratorios productores y en el momento de la adquisición de la misma, protocolos de seguimiento estrictos y cercanos que se implementen en el país y se garanticen estrategias para la minimización y mitigación del riesgo de manera importante", indican y añaden: "Así mismo, es necesaria la implementación de protocolos de vigilancia intensiva en red con las demás agencias regulatorias, para monitorear y detectar señales tempranas que permitan actuaciones priorizadas en la prevención de eventos de rápida aparición en las fases iniciales de aplicación de la o las vacunas seleccionadas".
El reciente comunicado está firmado por la Asociación Colombiana de Farmacovigilancia, el Observatorio del Comportamiento de la Automedicación de la Universidad del Rosario, el Centro de Pensamiento Medicamentos, Información y Poder de la Universidad Nacional de Colombia, la Asociación Colombiana de Farmacología, la Asociación de Toxicología Clínica Colombiana, la Asociación de Farmacología Clínica, el Colegio Nacional de Químicos Farmacéuticos, la Asociación de Químicos Farmacéuticos de Bogotá y Cundinamarca, la Asociación de Químicos Farmacéuticos de Antioquia, el Colegio de Químicos Farmacéuticos Unidad Regional Valle del Cauca, la Asociación de Químicos Farmacéuticos del Atlántico, el Observatorio de Salud Pública y Epidemiología de la Universidad de los Andes y la Asociación Colombiana de lnfectología.