Reconoció, no obstante, que hay temas sobrevinientes y deudas pasadas que la cifra señalada no reconoce.
Con un requerimiento de 3.5 billones de pesos adicionales para la operación de la salud de los colombianos en el 2019, el ministro de Salud y Protección Social, Juan Pablo Uribe Restrepo, presentó, ante las comisiones económicas del Congreso de la República, las principales necesidades presupuestales para el sector salud en el próximo año.
"Estamos en una coyuntura de la salud colombiana, difícil y retadora, y es muy importante que juntos podamos enfrentarla con un presupuesto suficiente para tener la liquidez que requieren las dificultades que tenemos", indicó Uribe Restrepo.
El déficit, pero al mismo tiempo los nuevos retos para el sistema de salud se ubican, según señaló el ministro de Salud, en varias dimensiones: en primer lugar, Salud Pública, en la que se contemplan principalmente programas como el Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), programas de promoción y prevención y las encuestas nacionales que alimentan de manera cuantitativa el progreso de Colombia en su salud pública. Los programas de inversión y funcionamiento del Ministerio sufren un déficit de 365.000 millones de pesos, según explicó. Otro aspecto es el aseguramiento, entendido desde la financiación de la salud a través de la ADRES, en el que, según destacó Uribe Restrepo, el principal reto son los recursos por los servicios No POS, aspecto en el que hay un déficit de 3.1 billones.
Asimismo, estos recursos serían para el Instituto Nacional de Salud (INS), que en palabras del ministro Uribe Restrepo requiere ser fuerte, robusto, técnico, capaz de acompañar a los departamentos en el reto epidemiológico, que tiene un déficit de 25.000 millones de pesos; el INVIMA, que en momentos de industrialización de los procesos requiere capacidad de intervenir en los frentes de seguridad sanitaria y que tiene un déficit de 16.000 millones de pesos; la Superintendencia Nacional de Salud, que requiere fortalecer sus funciones con mejores sistemas operacionales, descentralización, mayor atención al ciudadano y capacidad de intervenir ante los abusos y obstáculos que los colombianos enfrentan, en el que la diferencia presupuestal es de 30.000 millones de pesos; y el Instituto Nacional de Cancerología (INC), que tiene el reto de enfrentar la segunda causa de muerte en Colombia, las enfermedades oncológicas, y que tiene cinco proyectos para el reto que cubren cerca de 25.000 millones de pesos.
"Todos los aspectos que se deben atender con el presupuesto solicitado son fundamentales en la construcción de una política nacional que haga frente a las problemáticas de la salud para lograr el bienestar de la población", destacó el ministro ante los congresistas.
Finalmente, Uribe Restrepo resaltó que hay temas sobrevinientes y deudas pasadas que la cifra señalada no reconoce, aunque, apuntó, no es que se estén ignorando, tales como el saldo de la liquidación de Caprecom, los retos de la migración venezolana y la reglamentación de la Ley de Residencias Médicas, que va a requerir, según explicó, una adición presupuestal para el año que viene de aproximadamente 120.000 millones de pesos, una vez descontados los recursos de las becas crédito.