Para esta fecha el Ministerio de Salud estima la obligatoriedad de la medida, estando aún pendiente la expedición de la resolución para que la industria realice los ajustes pertinentes.
Con el fin de cumplir con el etiquetado nutricional que deben tener los alimentos envasados para consumo humano, se lanzó el modelo colombiano de etiquetado frontal nutricional para alimentos y bebidas. Se trata de un sello frontal de advertencia, el cual será monocromático con reporte de alto en azúcares añadidos, sodio y/o grasas saturadas. Los límites para establecer estos criterios en el país están armonizados con la tendencia regulatoria regional, afirman desde el Gobierno nacional.

Según dio a conocer el Ministerio de Salud y Protección Social, el último paso en la adopción del etiquetado nutricional en Colombia deberá darse en mayo de 2021 y su obligatoriedad, se estima, comenzará en noviembre de 2022. Estas disposiciones se implementarán en un tiempo aproximado de 18 meses, una vez se expida la resolución para que la industria realice los ajustes pertinentes, añade la cartera de Salud del Gobierno nacional.
El principal objetivo es que la información nutricional que está en la etiqueta se presente de forma clara y comprensible para el consumidor, aseguran desde MinSalud. Así como evolucionar el marco normativo actual, pasando de acciones voluntarias a obligatorias, añaden.
Con esta propuesta se busca también rediseñar la tabla nutricional haciéndola más simple, así como el aumento de su tamaño para facilitar su lectura, indican desde el Ministerio. Es necesario además presentar el contenido de nutrientes por 100 gramos o 100 mililitros y por porción.