De familia puritana inglesa, soldado y capitán de caballería, combatió al lado del político inglés Oliver Cromwell en las guerras antimonárquicas inglesas. Thomas Sydenham (1624-1689) estudia medicina en las universidades de Oxford en Inglaterra y Montpellier en Francia. Obtiene el título de Doctor en medicina en Cambrigde en 1676. Amigo del filósofo John Locke, que también estudió medicina, a Sydenham se le considera el mayor clínico del siglo XVII; predicó el retorno a Hipócrates y se mantuvo aparte de las teorías médicas y la experimentación científica de su tiempo. Más estimado muerto que vivo, cuentan que Boherhaave, se descubría al nombrar a Sydenham.

Publica en 1766, Método para curar las fiebres y en 1676 sus Observaciones médicas. Sydenham da un giro a la Medicina en la segunda mitad del siglo XVII, reviviendo el método hipocrático de la observación a la cabecera del enfermo y reivindicando la experiencia. Busca, como Bacon, construir un saber médico basado en la experiencia no en la especulación de iatrofísicos, iatroquímicos y rezagados galénicos, que se habían olvidado del paciente. Por el retorno a los principios hipocráticos, se le conoce como el Hipócrates Inglés y como el Padre de la Clínica en la Gran Bretaña. Recomendaba a los médicos leer un solo libro el de Hipócrates y el Quijote de Cervantes. Sostenía que para el médico práctico eran inútiles las especulaciones causales. El médico debe limitarse a observar al paciente, "prescindiendo por completo de cualquier hipótesis fisiológica" y estudiar las diferentes especies de enfermedad, para encontrar métodos curativos estables.
Se le considera fundador de la epidemiología al sostener la influencia de factores climáticos y atmosféricos en las enfermedades infecciosas. Diferencia como Hipócrates las enfermedades agudas y las crónicas, recupera el aspecto biográfico, el papel de los estilos de vida en la causalidad de la enfermedad. "Debes ir a la cabecera del enfermo, el único lugar donde puedes aprender la enfermedad". Como un pintor, quiere pintar con su pincel todos los detalles que conforman el cuadro clínico y los clasifica en especies como botánico. Describe magistralmente las enfermedades: la viruela, la gota, las fiebres, la histeria, la corea menor, que lleva su nombre, conocida antiguamente como el Baile de San Vito. Le da categoría a cada una de las enfermedades, las delimita y clasifica, registrando cuidadosamente sus observaciones en la historia clínica.
Su clasificación y delimitación de las enfermedades se constituye en el comienzo del interés por precisar el diagnóstico clínico. Su patología es humoral, hipocrática: "La enfermedad no es otra cosa que un esfuerzo de la Naturaleza para exterminar la materia morbífica, procurando con todos sus medios la salud del enfermo". Sydenham clasifica las enfermedades en "especies morbosas" y las concibe como "regularidades de la Naturaleza", a la manera de las especies botánicas, a través de la observación clínica y la experiencia. La Vix Medicratix Naturae de Hipócrates orienta también la terapéutica sydenhamiana, Sydenham popularizó la quina americana utilizada para tratar las fiebres, creó el opio líquido, el famoso láudano de Sydenham o Vino de España, que estaba hecho con opio, azafrán, clavos y canela; usó tónicos de hierro, aire fresco en la habitación del paciente, dieta, sangrías, lavativas y la equitación. Reintroduce el mercurio para la sífilis. Prescribe dietas, purgantes y recomienda colocar un cachorro sobre un abdomen de un paciente o acostar niños en la cama del enfermo.

Abel Fernando Martínez Martín
Doctor en Medicina y Cirugía, magíster y doctor en Historia.
Grupo de investigación Historia de la Salud en Boyacá- Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia (UPTC).